El próximo sábado 25 de octubre el arquitecto estadounidense Frank Gehry regresará a Bilbao (España) para poner la primera piedra del futuro puente que llevará su nombre, en honor a su aporte en el impulso turístico y económico que resultó ser la construcción del Museo Guggenheim (1997) en la ciudad española.
De 75 metros de longitud, el puente conectará la actual península -futura isla- de Zorrotzaurre -otrora barrio industrial en actual proceso de gentrificación- con el barrio local de San Ignacio. A comienzos de año el alcalde de Bilbao, Ibon Areso, justificó su decisión de bautizar al puente con el nombre del Premio Pritzker 1989 señalando a la Cadena SER que "Frank Gehry ha sido un hombre que ha dado una proyección internacional a Bilbao importantísima".
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Diseñado para albergar dos carriles de circulación para automóviles, dos carriles para transporte público y una ciclovía, la ceremonia simbólica del inicio de obras del futuro puente Frank Gehry contará con la presencia del arquitecto estadounidense un día después de recibir el Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2014 en la ciudad de Oviedo (Asturias, España).
El reconocimiento de Bilbao a Gehry se justifica por la apertura del Museo Guggenheim (1997) que convirtió a la ciudad en uno de los principales puntos turísticos de España y fue el germen del denominado "Efecto Guggenheim", entendido como la catalización económica y transformación urbana que genera cierta inversión en infraestructura cultural. No obstante, según Iñaki Esteban en "El efecto Guggenheim, del espacio basura al ornamento" (2007), “un ornamento como el Guggenheim debe tener la suficiente singularidad para atraer el turismo en una civilización transitada por la competencia entre imágenes”. Sin ornamento, según Esteban, una ciudad que aspire a convertirse en destino turístico internacional no será competitiva.
En ese sentido, a nueve años de su inauguración, la cadena BBC estimó que el impacto del Museo Guggenheim en la economía del País Vasco fue superior a los 211 millones de euros. Mientras en 2013, el Museo Guggenheim de Bilbao recibió a 931.015 visitantes y un 65% correspondió a turistas extranjeros, provenientes principalmente del resto de Europa.